JimHast

BANDAS

PRODUCCIÓN DE
BANDAS SONORAS

COMPOSICIÓN PIEZAS DE ARTE SONORAS

OBRAS DE TEATRO / DANZA / ARTE

Conceptualización para musicalización y diseño sonoro de bandas sonoras para imágen y proyectos escénicos.
 

PROYECTOS
PRODUCIDOS

Más de 40 musicalizaciones a la fecha

RITO DE PRIMAVERA 2014 (José Vidal y compañía)

Aproximadamente 100 años después, José Vidal & Co se embarcaron en la búsqueda de un contraparte contemporánea y comenzaron a explorar los rituales de nuestra época. Encuentran su camino en la cultura de club: la producción respira el espíritu de los eventos psicodélicos, goa-trance y techno. Rituales de hoy en día diseñados para crear estados extáticos a través del ritmo y la música. En este sentido, Vidal y su elenco de 50 bailarines, la mitad de los cuales provienen de su compañía en Santiago de Chile y la mitad de la escena local, crean un evento que habla a todos los sentidos.

El multiinstrumentista y DJ Jim Hast y el músico Andy Abarzúa compusieron la música para este ritual colectivo. Su banda sonora electrónica, rica en bajos y ritmos, en la que se preserva la estructura rítmica de la música original de Igor Stravinsky, inevitablemente pone en movimiento los cuerpos de los 50 bailarines y del público, atrayéndolos hacia una atracción meditativa.

Como una coreografía de grupo monumental, RITO DE PRIMAVERA enfatiza la necesidad de redescubrir el ritual para nuestros cuerpos contemporáneos. Desde su estreno, la producción se ha presentado en varias versiones en festivales internacionalmente relevantes, incluyendo el Festival Santiago a Mil, el Holland Festival, el Festival de Marsella, Kampnagel en Hamburgo y el Festival Cielos del Infinito en Punta Arenas, Chile.

EL OTRO 2015 (Teatro Niño Proletario)

La obra conjunta de Diamela Eltit y Paz Errázuriz —El infarto del alma— responde a la inquietud de ambas artistas por la representación exploratoria de sujetos marginales desde un trasfondo ético y estético que desafía la configuración lógica y determinista de un discurso dominante y, en donde la voz testimonial de los desplazados devela ese olvido social del que son objeto cotidianamente.

La puesta en escena que realiza la compañía «Teatro Niño Proletario» se centra en lo visual, dando cabida a movimientos y gestos que dirigen el relato desde lugares carentes de secuencias ordenadas y, así, se quiebra la hegemonía de la cordura. La dificultad que aparentemente manifiesta el lenguaje para capturar a estos “locos” abre el espacio para generar juegos en los que la razón y el sin sentido se encuentren; de esta manera los diálogos quebrados/rotos/faltantes sirven de puente para conectar con líneas y puntos de fuga que nos hablan de algo más primigenio: el amor.

Pacientes enamorados que generan vínculos amorosos y disruptivos son los protagonistas que, lejos de enmudecer, manifiestan un repertorio de movimientos que reaccionan al cuerpo del otro. La comunicación es carnal y la voz se transmuta de sonido a tacto.

FULGOR (teatro Niño Proletario)

La migración ha sido entendida, habitualmente, en términos burocráticos como un movimiento lineal entre origen y destino traspasando fronteras, pero sabemos que la migración trae consigo mucho más que un cuerpo pues traslada objetos, modifica identidades, moviliza fuerza de trabajo, explotación y vulnerabilidades. Fulgor es preguntarse ¿qué pasa con la experiencia de estos movimientos? ¿cómo se dibuja en nuestra cartografía personal? ¿desde cuándo el otro se ha convertido en un peligro? Si hombres y animales se han movido libremente desde su origen, encontrándose, siendo otros en el viaje, construyendo una patria en su lengua y un territorio que es su cuerpo; entonces, Fulgor se compone de historias íntimas en el cruce prohibido de líneas invisibles, la escena invoca un paraíso de tierras míticas o mundos imaginarios en los se podría ser lo que se desee. Cuerpos, que obligados o voluntariamente, enfrentan la falta de oportunidades, el desarraigo, la fiesta, el amor y la soledad.